A pesar de la complicada situación económica en España durante los últimos años, los buenos clubs han seguido invirtiendo para asegurar su prosperidad a largo plazo. Uno de los campos más antiguos de la Costa del Sol, Atalaya Golf & Country Club, ha realizado una gran inversión en su futuro remodelando completamente el hoyo uno de su campo Old Course.
David Krause y su equipo, al finalizar la construcción de un nuevo camino de acceso a un desarrollo inmobiliario adyacente al campo, fueron invitados a crear un emocionante hoyo de inicio que compensara la distancia perdida por la extensión de los tees hacia la casa club. Para dar cabida a la carretera, el green se desplazó a unos cuarenta metros se y enmarcó con una serie de montículos y un nuevo elemento de agua a la izquierda. También se ha apoyado con un bunker de arena y varios profundos bunker de hierba, lo que añade importancia a la posición de la bandera en el nuevo green. Por otro lado, el golpe de aproximación puede variar, de ser muy fácil hasta arruinar la vuelta al profesional experimentado.
Los cambios reflejan el juego moderno y refrescan algunas de las ideas de diseño que se han desdibujado un poco durante los últimos cincuenta años. Sin embargo, el hoyo conserva el carácter elemental de uno de los mejores diseños de Bernhard von Limburger, un arquitecto de campos de golf que amaba Atalaya y que vivió allí durante los últimos años de su vida. El contratista del campo de golf, Chameza Golf, trabajó en la creación de este pintoresco hoyo de golf en estrecha colaboración con Krause Golf Design, con el director gerente del club, Andrés Sánchez, y con el director del campo, Manuel Cuadro.
Ya en la casa club, el restablecimiento del tee profesional original y un nuevo putting green fueron acompañados por un toque adicional: un tee en la azotea en el nuevo quiosco de refrescos. Inspirado por el vanguardista artista austriaco Hundertwasser, el presidente del club, Alexander Hanschke, ha tomado una sencilla estructura de hormigón y ha creado una obra maestra en Atalaya Golf para ser disfrutado antes y después de una ronda en el Old Course.
Por último, una más que bienvenida bienvenida mejora para el campo de golf de treinta y seis hoyos es el desarrollo de una nueva instalación subterránea de parking. Incrustada en unos complicados terrenos al lado de la casa club, la estructura de parking fue diseñado por el arquitecto local Alfonso Ruiz y proporcionará ciento treinta y cinco plazas de aparcamiento adicionales junto con área de almacenamiento y una fuente de alimentación para coches eléctricos y coches de golf.
“Ha sido un reto reunir todo en el club, así como firmar el acuerdo de propiedad para las nuevas instalaciones de parking”, indica Andrés Sánchez, director gerente de Atalaya Golf & Country Club, sobre la inversión de más de dos millones de euros. “Todavía tenemos mucho que hacer pero estamos muy contentos con los resultados del trabajo de David Krause y su equipo hasta ahora. Nuestros socios están muy emocionados de jugar el nuevo hoyo. ¡Esperamos ver las nuevas instalaciones del parking estén terminadas a finales de este año, justo a tiempo para nuestras celebraciones del cincuenta aniversario en 2018!”.
