Así lo ha reconocido este lunes en el Pleno del Parlamento regional, en una interpelación del grupo mixto-Vox, la consejera de Turismo y presidenta del Consejo de Administración de Cantur, la regionalista Marina Lombó, quien ha explicado que los «números» definitivos de esta sociedad regional de promoción turística a cierre del año dependerán de la evolución de la pandemia y también de si, finalmente, se permite o no abrir la estación de esquí de Alto Campoo.
Lombó ha atribuido estos resultados negativos de Cantur este año al impacto de la pandemia en sus instalaciones, que han obligado a mantenerlas cerradas durante varios meses.
También la consejera lo ha achacado a las campañas de gratuidades a las instalaciones de Cantur puestas en marcha por el Gobierno de Cantabria asociadas al consumo en bares, restaurantes y cafeterías de la región con el objetivo de apoyar al sector de la hostelería y el turismo y ayudar a paliar en parte el impacto de la pandemia.
La consejera ha reconocido que estas campañas han supuesto menos ingresos para Cantur por entradas a sus instalaciones, aunque, a juicio de Lombó, dichas iniciativas han sido un «acierto» para apoyar a los sectores de la hostelería y el turismo.
Lombó ha señalado que el pasado año Cantur tuvo una cifra de negocio de más de 22 millones de euros y este año, a 31 de octubre, apenas se superaba los 14. Según ha indicado, la previsión para final de año «no es buena» y, si se mantienen las actuales restricciones, los ingresos serían 7,5 millones inferiores a los de 2019.
La consejera de Turismo ha indicado que, a finales de octubre, el resultado de la explotación en Cantur arroja un resultado negativo de 2,2 millones, frente al saldo positivo en 1,2 millones que tenía en el mismo periodo del año pasado.
Pese a todo, Lombó ha destacado que en este año 2020, «muy excepcional y muy complicado a todos los niveles» por la pandemia del COVID y sus efectos, Cantur ha servido de herramienta de apoyo a sectores muy afectados, como la hostelería y el turismo.
PERSONAL
También en respuesta a la interpelación de Vox, la consejera ha explicado que Cantur tiene 389 trabajadores de los que 323 son fijos, 40 eventuales y 23 fijos discontinuos. De estos últimos, solo cuatro se encuentran trabajando en el Museo Marítimo.
El portavoz parlamentario de Vox, Cristóbal Palacio, ha preguntado a la consejera por los motivos por los que en Cantur no se ha aplicado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), algo que, a su juicio, hubiera ahorrado un millón de euros.
«Nos pasamos el día pidiéndole a Madrid dinero, nos pasamos el día pidiendo transferencias y cuando surge la oportunidad de transferir un coste al Gobierno central no lo hacemos», se ha quejado Palacio, que cree que Cantur reunía las condiciones para poder aplicado este ERTE.
Como respuesta, Lombó ha afeado a Palacio que ahora hable de esa posibilidad del ERTE cuando han pasado ocho meses desde el inicio de la pandemia.
Además, ha contradicho a Palacio y ha afirmado que no se trata de una opción «tan garantista» como él asegura y ha indicado que en algunas sociedades públicas de España donde se ha querido aplicar no se ha podido hacer finalmente.