Tiger Woods tuvo un aparatoso accidente de coche en la tarde del miércoles, perdiendo el control de su vehículo por conducir a gran velocidad en una zona de curvas peligrosas, pudiéndole haberle costado la vida. El golfista estadounidense sufrió varias fracturas en las piernas de las cuales ya se está recuperando tras las pertinentes operaciones.
Un suceso que recordó al fatídico accidente de helicóptero que hace menos de un año sufrió la leyenda del baloncesto Kobe Bryant, en el que perecieron tanto él como los otros tripulantes del vuelo, entre los que se encontraba su hija Gianna.
Afortunadamente para Woods, se espera que tras un proceso de rehabilitación, eso sí, tomando su tiempo, pueda retomar su vida normal, con la gran incógnita de si podrá volver al golf profesional. La esperanza de volver a ver a Woods sobre el green radica, en gran parte, en la rápida labor de los servicios de emergencia que se personaron en el lugar de los hechos poco después del accidente.
El sheriff Carlos González, fue el primero en llegar al sitio donde Woods tuvo el accidente, y ha querido relatar cómo fue el escenario que se encontró. Sorprendentemente, el golfista se encontraba completamente consciente y tranquilo pese a la gravedad de lo sucedido.
«Estaba calmado y consciente. Le pregunté su nombre, me dijo que era Tiger. Le pregunté la fecha y hora y me contestó lúcido y calmado. Su condición era estable. No creo que él se diera cuenta de la gravedad de sus heridas en ese momento. Podría ser una mezcla de adrenalina, podría haber sido un shock», contó el sheriff en el programa Today.
«Pasó todo muy rápido desde el momento en el que se dio vuelta con el coche hasta que yo llegué, así que no sé si tuvo tiempo de evaluar completamente sus lesiones. El señor Woods parecía tranquilo, no parecía estar angustiado, y pudo hablar un poco conmigo. Noté que el compartimiento del pasajero parecía casi intacto», añadió.